Imprescindibles de Córdoba
Una de las ciudades más visitadas de España y de la que poder disfrutar sin necesidad de largos alojamientos. Muy bien conectada con el resto de la península en gran parte por estar en el centro de Andalucía y con parada del AVE a Sevilla, Córdoba es una perfecta opción para una escapada de fin de semana. Eso sí, para no dejarnos nada por el camino, estas son las 10 recomendaciones imprescindibles para no perderse en Córdoba:
1 – Mezquita Catedral de Córdoba
Pensar en Córdoba es pensar en su mezquita. Obra maestra delegada del paso de los árabes durante sus siete siglos de estancia y transformada en catedral posteriormente es uno de los reclamos turísticos de la ciudad. El minarete sirvió de inspiración para la realización de la torre de la mezquita de la Koutobia en Marrakech.
Pasear por ella por la mañana nos puede enseñar cómo los tragaluces y vidrieras permanecen allí después de tantos siglos. De todas formas, mi recomendación es la visita nocturna que da una visión totalmente diferente. Es una visita guiada bastante reducida que puede estar limitada a determinados momentos del año (temporada alta). Lo mejor es que puedas consultar las diferentes opciones de visita en la web de la Mezquita de Córdoba.
2 – Baños árabes, imprescindibles en Córdoba
Si bien es conocida Córdoba es por haber reunido en un mismo municipio durante siglos a diferentes culturas y religiones. Por sus calles han estado viviendo romanos, árabes, judíos, cristianos, … y uno de los legados por los que se conoce a la ciudad serían sus baños árabes. No solamente permanece en pie la Mezquita. El paso de Al-Andalus por la ciudad dejo su huella en construcciones, leyes, gastronomía y costumbres como la de acudir al hamman.
En la ciudad de Córdoba puedes encontrar dos opciones para disfrutar del hammam. Uno sería el Hammam Al-Andalus en la Calle Corregidor Luis de la Cerda, cerca de la Mezquita, entre ésta y la Plaza del Potro. El otro sería los Baños Árabes de Córdoba en el barrio judío. ¿Cuál recomendaría? El primero es más caro y quizás no quieras desembolsar mucho dinero. Si bien es cierto el silencio (que se respeta más que en el segundo) y la ambientación no tiene nada que ver con el segundo. La opción de los Baños Árabes en el barrio judío es la opción más popular pero cuando acudí estaba bastante más lleno de gente, mucho más ruido y peor ambientado.
3 – Alcázar de los Reyes Cristianos
Uno de los imprescindibles si se visita Córdoba es acudir a su alcázar. Como su nombre indica es un palacio fortificado considerado como uno de los Reales Alcázares, uno de los palacios reales españoles. Fue construido en el siglo XIV por orden de Alfonso XI de Castilla sobre un antiguo palacio donde residió el gobernador romano que estuvo en la ciudad y donde tenían la aduana debido a la proximidad con el río Guadalquivir.
Forma parte del Patrimonio Mundial de la UNESCO desde 1994 y recibe más de medio millón visitantes al año. Está compuesto por un palacio donde se pueden ver tapices y esculturas romanas y unos jardines con fuentes y estanques que son una delicia sobre todo cuando el calor aprieta en la capital cordobesa.
Al igual que ocurre con la Mezquita Catedral, existe una visita nocturna que da otra visión de lo que se puede encontrar el visitante de día. Si bien es cierto, la visita nocturna se centra más en el juego de luces de las fuentes y existen zonas que se visitan por la mañana que por la noche no se puede acceder. Lo ideal es que se consulte horarios y disponibilidad en la web del Alcazar de los Reyes Cristianos para no tener problemas de acceso.
4 – Las plazas imprescindibles de Córdoba
Más allá de visitar puntos turísticos, merece la pena poder adentrarse en la ciudad y por qué no, perderse por ella. Habrá zonas de la ciudad que no resultará difícil perderse ya que el barrio judío y las calles anexas a la mezquita-catedral son bastante enrevesadas y parecidas entre ellas. Seguramente, en el escape del laberinto acabará siendo una de las tres plazas más míticas del centro de la ciudad de Córdoba o al menos mis tres favoritas.
La más pequeña es la Plaza del Potro. Es la que se encuentra más al sur, más cerca del río y tiene una estatua de un pequeño potro encima de un monolito, dentro de una fuente. La plaza empedrada está junto a una iglesia, comercios artesanos y un centro de estudio del flamenco donde se puede acceder y conocer mejor uno de los ejes vertebrales de Andalucía.
Desde allí, subiendo hasta la Calle San Francisco y girando a la Calle Armas se accede a la Plaza de la Corredera. Se trata de una plaza porticada de forma rectangular y que ha tenido diferentes fines (hasta plaza de toros) a lo largo de su historia. Su forma, que recuerda a la Plaza Mayor de Madrid es única en Andalucía.
La tercera plaza sería la de las Tendillas. Situado junto a lo que era el Foro Romano antiguo, es el centro de la ciudad de Córdoba. Su nombre procede de las pequeñas tiendas que había en las inmediaciones. En dicha plaza podemos encontrar el Monumento al Gran Capitán, caballo y cuerpo de bronce y cabeza de mármol blanco y el Reloj de las Tendillas, donde los cordobeses despiden la nochevieja.
5 – Templo Romano
Muy cerca de la Plaza de las Tendillas encontraríamos el Templo Romano. De camino a la Plaza de la Corredera, a mano derecha, sin necesidad de fijarse mucho surgen unas columnas corintias que es el último vestigio romano que se encuentra en Córdoba. Se trata de 11 columnas que formarían un altar y que con base reconstruida llaman la atención por su grandiosidad y estado de conservación.
6- Barrio Judío de Córdoba
Junto a la muralla, muy cerca de la mezquita se encuentra el Barrio Judío de Córdoba. Es una de las cosas imprescindibles a visitar en Córdoba. La judería forma parte del Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde el año 1994. Sus límites se encontrarían desde la Puerta de Almodóvar hasta la propia mezquita. Es el barrio más típico de Córdoba donde destacan las calles estrechas, las tiendas artesanas, los sitios fantásticos para comer y la Sinagoga, una de las pocas que quedan en pie en toda España. Es un paseo por sus calles algo muy recomendado.
7 – Los Patios, imprescindibles en Córdoba
Los patios cordobeses son identificables en todo el mundo. Fachadas blancas llenas de macetas de colores muy floreadas que hacen desaparecer las casas sobre las que se apoyan. A lo largo de toda la ciudad se pueden visitar pero hay zonas con mayor concentración de ellos por lo que es bueno saber donde localizarlos. Para tenerlos identificados puedes acudir al Centro de Interpretación en la Calle Trueque 4. Es una casa emblemática que se crea para dar difusión a la Fiesta de los Patios que se realiza en la primera quincena de Mayo.
En el Barrio de San Basilio, cerca del Alcázar hay gran concentración de patios con innumerables premios. Allí también se encuentra, en la Calle Martín de Roa la Escultura del abuelo y niño, en honor a la tradición generación tras generación del cuidado de los patios.
Otro punto emblemático, junto a la Mezquita sería la Calleja de las Flores. Un callejón estrecho, normalmente con bastante afluencia de gente porque es un secreto a voces, desde el cual se puede ver una estrecha calle con muchas macetas y con la Torre del Campanario de fondo. Si estás por la ciudad merece la pena acudir por la noche para observar el juego de luces y una menor afluencia.
8 – Puente Romano
El Puente Romano de Córdoba es el puente más emblemático y antiguo de la ciudad sobre el Guadalquivir. Se estima que el puente del siglo I antes de cristo y aunque ha sido remodelado varias veces. La última en 1876. Tanto el puente como la orilla del río, por ambos lados merece un buen paseo al atardecer.
9 – Gastronomía cordobesa
Quizás los patios y la Mezquita son la excusa para acudir la primera vez a ver Córdoba pero es la gastronomía la que seguramente te haga repetir en el futuro. La ciudad es un crisol de religiones y pueblos diferentes durante años y esto no solamente algo que se palpe en las construcciones o en las costumbres, también en la gastronomía.
Si quieres saber dónde, no te sabría elegir. La zona de la judería concentra muy buenos sitios. Casa Pepe es uno de los mejores sitios y de los más típicos pero quizás también es de los más caros. Puedes optar por opciones más económicas sin perder demasiado en sabor. Cerca de la Puerta de la Luna, igualmente en la Judería puedes encontrar buenos lugares. Merece la pena la visita a la Calleja del Salmorejo Cordobés, dónde se indica la receta.
Si quieres saber qué pedir es bastante fácil. Los platos imprescindibles antes de irte de Córdoba deberían ser las berenjenas con miel, el flamenquín, la carne con tomate, el rabo de toro o el famoso salmorejo cordobés (sopa fría espesa que lleva miga de pan, tomate y aceite).
10 – Calle Cairuan
Se trata de una calle paralela a la muralla de la ciudad que va de la Puerta de Almodóvar hasta la Puerta de la Luna. Junto a unos estanques árabes y unos pequeños jardines que por la noche trae unos aromas a jazmín fantásticos. En dicha calle puedes encontrar la estatua de Averroes, un jurista, astrónomo, filosofo y medico nacido e Córdoba durante la ocupación del Imperio almohade y realizó grandes aportaciones al pueblo cordobés y a la cultura en general.